El segundo nacimiento de Moravia

Moravia conocido como el “antiguo basurero” ò “Moravia antes Fidel Castro”, ubicado en la comuna Nor–Oriental del municipio de Medellín, entre la calle 77 y la vía a Moravia y entre Carabobo y la margen oriental del rio Medellín se  ha convertido hoy en uno de los sectores con grandes avances culturales, socioeconómicos, educativos y políticos, después de ser uno de los barrios con grandes problemáticas sociales.

La historia de está comuna nos traslada a la época de los años 60 y 70 cuando muchos desplazados de los diferentes barrios de Medellín y de los municipios de Antioquia y otros departamentos entraron este sector buscando un refugio, muchos de ellos con problemas económicos llegaban a Moravia sólo con su ropa y su familia. Uno de estos casos lo vivió el señor Eduardo Hoyos, quién habita en Moravia hace 30 años y fue uno de los lideres de la Junta de Acción Comunal del barrio, “yo vengo de naranjal, llegué a Moravia porque me dijeron que por acá estaban regalando lotes, pero se tenia que venir a cogerlos, llegamos acá sin nada, éramos muy pobres, nosotros construíamos nuestras viviendas y nos tocaba quitar las  hojas de plátano para cubrirnos”

Así empezó la interminable cifra de habitantes que se ubicaban en  Moravia, pero estas primeras ocupaciones se presentaban de manera dispersa, conservando grandes distancias, separados de los ranchos por extensión de rastrojo, estos mismos eran construidos por desechos de cartón, latas etc., en lo que si coincidían era en el hecho de ubicarse a los lados de la carrilera del ferrocarril.  *

La montaña de basura se iba extendiendo, en ese tiempo era un cebollal, se estaba hacinando todo el terreno del morro y demás barrios como el Bosque, los Llanos, pero la forma de ocupación de esta zona no fue solo de invasión, también fueron comprados ranchos o lotes ya invadidos por otros con anterioridad. Sin embargo,  la comunidad de Moravia y Fidel Castro no era considerada un terreno que se valorizará; por muchas razones, una de ellas fue la  más fuerte problemática de Moravia, lo socioeconómico; muchas familias reasentas allí llegaban por la  fuente de trabajo que llamaba la atención a mucha población que no tenía ningún tipo de recursos,  el oficio del reciclaje considerado para muchos habitantes era muy fácil de realizar y que de alguna manera ayudaba a la sustentación de la familia, trabajo que aún se sigue viendo en Moravia, actualmente existen tres casas de reciclaje por cuadra, aspecto que preocupa a la administración por el estancamiento de algunas familias por no buscar otras alternativas de trabajo y no vincularse a los nuevos proyectos de la alcaldía.

Y a partir de situaciones socioeconómicas que vivían los habitantes de la comuna 4, este sector y sus habitantes fue siendo estigmatizado por el resto de la ciudad como: basureros, limosneros y de muy baja categoría. Además por su calidad de vida tan deteriorada. Pero igualmente dicho terreno se había convertido en uno de los lugares céntricos de la ciudad, a su alrededor se había construido obras como: Parque Norte, Jardín Botánico, Terminal de Transportes y a futuro las ampliaciones de calles y del Parque Norte.  Todo este panorama al que presenciaban los habitantes de Moravia fue vinculando a muchos a crear comités barriales ya la creación de la Junta de Acción Comunal dirigida en ese entonces por el señor Gabriel Cuervo, retomado a finales de 1979 por José Augusto Ramírez Olaya, presidente por mas de 14 años, quién por muchos tiempo ha sido un gestor importante por la trasformación de su barrio, y que además admira a su grupo de trabajo por la lucha de una mejor calidad de vida en la comuna en la que ahora ve un gran cambio, todo gestionado desde la iniciativa de la junta y la comunidad,   porque Moravia era “tierra de nadie”, aquí no entraba ni un cartero, ni la ley”. De tal manera que se estaban conformando diferentes representaciones dentro del barrio como: el Comité Popular dirigido por el padre Vicente Mejía y Alfonso Durango que según, Augusto Ramírez, tenían una visión política militar de izquierda, llamada Fidel Castro, su visión era “tugurianos eran y tugurianos tenían que ser” , así mismo la creación de la Junta de Acción Comunal dirigida se oponían a esta perspectiva porque era como castrarle la oportunidad a la juventud de esa época el crecimiento del barrio y su desarrollo social se estancaba, era una política de conformismo; a diferencia del comité querían legalizar los servicios públicos en el barrio ,entonces se empezó a mejorar las calles a crear una cultura de legalidad aunque con presupuestos bajos; tuvimos la fortuna de contar con el apoyo del ex alcalde, Bernardo Guerra Serna, quien  nos nombro un promotor William Espinosa, y se logró que se legalizara el agua y la luz.

Ya Moravia empieza a ser uno de los aspectos incluyentes para tratar la Alcaldía de Medellín, y a partir de ese reconocimiento como barrio y de analizar sus problemáticas y su ubicación como eje referencial a estrategias urbanísticas, en el año 1983 se hicieron unos acuerdos con la administración para el mejoramiento integral del barrio, y se creo el Plan de Rehabilitación que  luego al año siguiente se empezó a ser realidad con la construcción de adoquinar algunas calles, también se tenía una visión de planeación de diferentes espacios para la salud y la educación.

Y así se conforma a lo largo de 20 años un sector de la ciudad que desarrolla internamente sus propios procesos, sus formas de organización y lucha, puesto que además de la subsistencia tienden a enfrentar las distintas políticas que el estado implementa para dar respuesta a la demanda creciente de vivienda, salud, educación. De las clases explotadas y pauperizadas por el proceso de desarrollo capitalistas de las ciudades. *

Moravia empieza a crecer en población y en desarrollo social, avanza igual el proceso capitalista avanza en la ciudad de Medellín, fue así donde la intervención de la administración empezó un proyecto pausado y estancado por mucho tiempo, situación que empeoro cada vez más la calidad de vida de los habitantes de Moravia. Después de sufrir y de batallar por derechos de muchos habitantes que se enfrentaban con las exigencias de la ciudad, este proyecto se volvió a retomar con la construcción de un plan parcial en el 2002 fue retomado por el ex acalde Sergio Fajardo, quién le apuesta a ese plan desarrollando diferentes acciones llevado a cabo con la comunidad, lo cual lo caracteriza de ser un plan hibrido y participativo, afirmó, Paula Londoño, Asistente de Gerencia del Macroproyecto de Moravia.

Y aunque el Macroproyecto responde al mejoramiento de la calidad de vida de los moravitas, para algunos habitantes este proyecto ha roto acuerdos pactados con la administración como el seguimiento de las mismas entidades al inicio del proceso concertado, el disgusto por los derechos de posesión no reconocidos en totalidad para los habitantes y la indiferencia de lo social en la intervención de lo urbano en la comuna, los cambios bruscos para muchos de casa por apartamento desconociendo así mismo el arraigo por un lugar construido mediante comités llenos de símbolos e historias e imaginarios y condiciones económicas favorables para la vida.

Sin embrago, las construcciones siguieron y uno de las últimas obras construidas bajo los componentes del Macroproyecto fue el Centro de Desarrollo Cultural Rogelio Salmona, que nace por unos acuerdos barriales que determinan el trabajo por la Casa de la Cultura, y se cambio a centro, cuando el  Secretario de Cultura Ciudadana visita la Escuela de Música Moravia el Bosque Vientos Y Percusión ubicada en el sector del Bosque acompañada de una familia adinerada de la ciudad, luego de ver el espacio de ensayo para los niños y jóvenes de esta escuela, que además brindaba el espacio para el proceso de desmovilización, decidieron invertir en un centro de Desarrollo Cultural, la única condición era que fuese Diseñado por Rogelio Salmona, para la construcción del proyecto la familia adinerada puso $7000 millones, la alcaldía entre $3000 y $4000 millones y para su ejecución se pusieron por parte de la administración municipal 1200 millones de pesos, Confenalco puso $350 millones y gestiono $ 120 millones más, aseguro, Yeison Henao, Promotor Cultural del Centro de Desarrollo Cultural Rogelio Salmona.

A si mismo el Macroproyecto invertirá para este año cerca de $49.915 millones , de los cuales $24.531 millones corresponden al Macroproyecto y $25.384 millones a inversiones aprobadas a otras secretarias y programas de la Alcaldía. 

Esto deja entrever que el desarrollo social del barrio Moravia, ubicado en una de las zonas con grandes proyectos culturales como el Parque Explora, el Parque Norte, la Universidad de Antioquia, el Parque de los Deseos, el Planetario Municipal, la Casa museo Pedro Nel Gómez, la Terminal de Transportes y el Metro, constituyen a este nuevo sector apetecido por muchos habitantes, estratégico por las oportunidades de económicas, culturales, educativas y sociales.